El aprendizaje de la tolerancia es el camino hacia la convivencia. Saber convivir es saber respetarnos.
No es fácil, ya que para ser tolerantes debemos acallar nuestro egoísmo y dejar a un lado al orgullo.
Pero es en el ejercicio diario de la tolerancia como logramos construir la hermandad y derribar los muros del odio y la injusticia.
El diccionario de la Real Academia define así esa valiosa virtud llamada tolerancia:
"Tolerancia es soportar al otro con la intención de entenderlo mejor.
Sólo a partir de esa mejor comprensión se ordenan los conflictos de intereses y los derechos de los contrincantes. La tolerancia exige coraje".
Y podemos ir más allá de esta definición y afirmar que la tolerancia nos mueve a aceptar al otro con amor, más que a soportarlo.
Nos mueve a ponernos en su lugar, a valorar las diferencias y a dejar que el otro viva su vida sin manipularlo ni presionarlo.
Y como toda virtud es recíproca, el otro también nos respeta y así logramos convivir en armonía. No es fácil pero es mejor amarnos que odiarnos y agredirnos.
Autor: Gonzalo Gallo González
martes, 16 de noviembre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
¡¡¡¡¡¡NUEVO TALLER!!!!! Esta época del año se caracteriza por el repaso de lo vivido en el mismo, reuniones y obsequios. Qué buen momento ...
-
Carl Rogers Influyente psicólogo en la historia estadounidense, quien junto a Abraham Maslow llegaría a fundar el enfoque humanista en psi...
-
Un maestro terminó el encuentro con sus discípulos diciéndoles:-Recuerden siempre “Descalzarse para entrar en el otro”. Uno de los jóvenes s...
No hay comentarios:
Publicar un comentario