Todo depende del ojo del que mira,este relato ilustra el dicho de que el vaso puede verse vacío o medio lleno.Lo que vemos depende de nuestra actitud .
Habia una vez dos vendedores de zapatos a quienes sus respectivas empresas enviaron a África para vender sus productos.
Tan pronto como desembarcó, el primer vendedor vio que todo el mundo iba descalzo y mandó un telegrama a su jefe: Vuelvo en el primer barco.
Aquí nadie usa zapatos.
Una semana más tarde llegó un segundo vendedor, el cual se encontró con la misma situación: sólo se veía gente descalza por las calles.
Pero éste envió el siguiente telegrama a su empresa: Me quedo aquí.
Perspectivas fabulosas.
No tenemos competencia.
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